En estos tiempos, vamos tan deprisa que hemos perdido el espíritu critico para cuestionar lo que ocurre a nuestro alrededor. Damos por hecho que ciertas cosas tienen que pasar porque si y hasta cierto punto hay algo de verdad, como la muerte.
Pero la contaminación, destrucción de bosques, glaciares y exterminio de especies es culpa nuestra. Hemos perdido nuestro espíritu crítico.
Para empezar, hemos crecido con un sistema educativo que no nos ha enseñado a pensar y si a creer que todo lo que nos enseñan es verdad. No cuestionamos nada y eso es peligroso.
Es como cuando vas a votar y lo haces porque te han educado en esas ideas, aunque sepas que no son buenas o por cualquier otro motivo sin pensarlo.
El espíritu critico es un tipo de pensamiento que emite juicios de evaluación y lo debemos enseñar desde la adolescencia, para que cuando seamos adultos seamos capaces de discernir la verdad y la mentira. Estamos en una sociedad donde la información nos llega por muchos lados, damos por hecho que es verdad y no pensamos por nosotros mismos.
Hemos dejado de ser escépticos y de cuestionarnos todo para pasar a un segundo plano lo que es importante.
Estamos destruyendo el planeta y no estamos enseñando a las nuevas generaciones a valorar las cosas verdaderamente importantes, como respeto a la naturaleza y personas etc.
Pensemos en lo que estamos haciendo y que mundo queremos dejar a las futuras generaciones. Nosotros tenemos la última palabra si queremos un mundo mejor, donde seamos libres de pensar como queramos siempre respetando al otro.